Bergen, 30 octubre 2006

En una cabaña de madera

Con mi mano izquierda sujeto una vela, la única fuente de luz de la que dispongo en este momento. Es tarde, la inmensidad de la noche se mezcla con el silencio de la nieve, que lo mantiene todo quieto y puro. He llegado con dos amigos al pie de uno de los glaciares más importantes de Noruega. La casita en la que nos encontramos lleva abirta desde 1914 para todo el que la necesite. Hay un cartel en el que sólo se pide que se deje un poco más limpia de como se encontró.
Hay una cama, una estufa para leña, una tetera, una mesita y una butaca. Gracias a la estufa, aquí dentro hace calor; fuera rondan los -10ºC. La cabaña está situada en la orilla del lago Stilla, al pie del glaciar. Hemos llegado de noche y ya sé que es uno de los lugares más bonitos del mundo.
Abajo hay nieve. Arriba, estrellas. Brillan tanto que parecen lucecitas de feria. Nunca había visto las estrellas tan brillantes en toda mi vida, no es ninguna exageración: tan nítidas en su relampaguear intermitente que parecen de broma. Hemos visto estrellas fugaces, aunque no recuerdo qué deseo he pedido... De hecho creo que no se me ha ocurrido nada, todo era perfecto.
Mientras mis amigos hn ido al coche me he quedado escribiendo aquí dentro, un oasis de calor en la inmensidad de la blanca Noruega.

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Bergen, 29 octubre 2006

Viaje express



El término "viaje express" significa alquilar un coche el viernes para devolverlo el lunes. El viaje es en su mayor parte en el interior del coche, se trata por lo tanto de recorrer carreteras con un paisaje bonito. Eso es lo que hemos hecho este fin de semana Miquel, Marina y yo. Nuestro destino: uno de los glaciares más grandes de Noruega.

Creo que ahora puedo decir que he visto Noruega. Viajamos en el Clio negro durante unas seis horas, atravesando paisajes de ensueño, encontrando todos esos lugares que siempre imaginé típicos de Noruega. La nieve por doquier, el coche a 30 km/h y, aún así, patinando en algunas ocasiones.
Es imposible describirlo exactamente, dibujar con palabras lo que sólo se puede sentir estando ahí. He colgado algunas fotos para que se vea cómo era el paisaje. Aún así, es para verlo. Este video es por la mañana, cuando nos despertamos en la casetita de madera llamada Fantestova. Es una cabaña con un cama, una chimenea y una mesita abierta desde 1914 para todos los que quieran usarla. En las paredes hay firmas de los excursionistas que han dormido en ella, incluidas algunas de 1914, 1922 y muchas otras más recientes. Firmamos el libro de visitas, por supuesto, y gracias a la chimenea de hierro conseguimos dormir en un lugar donde por la noche alcanzamos los -10ºC según el termómetro. Cuando llegamos allí era por la noche, y no teníamos agua, así que fundimos nieve y añadimos media cucharadita de azucar para evitar diarreas. Por la mañana bebimos agua del lago.

Tengo que volver a ese lugar tarde o temprano. Mientras tanto, para ver si alguien se anima a acompañarme, os dejo estas fotos.

La casita en la que dormimos
Vistas desde la casita
Lago verde-azulado y glaciar (el color era increíble)

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Bergen, 17 octubre 2006

Una semana off

He estado más de una semana sin publicar. Siento haber tardado tanto, pero he estado de viaje. No avisé antes de salir porque no esperaba tardar tanto en volver, son cosas que pasan cuando viajas en autostop. Mientras preparo la larga crónica, aquí un adelanto.

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Bergen, 02 octubre 2006

Universitas Bergensis: sistema educativo

Universitas BergensisAquí en Noruega las cosas en la Universidad funcionan diferente. No sólo se trata del sistema educativo, sino de la manera en la que se enfoca la enseñanza a nivel universitario en general.

EL CALENDARIO
En primer lugar, el calendario académico es completamente diferente. En Noruega, un año universitario está compuesto por dos semestres, el autumn semester (semestre de otoño) y el spring semester (semestre de primavera). Las matrículas se hacen independientemente para cada semestre, en agosto y enero respectivamente. Al contrario de lo que estoy acostumbrado, no hay demasiados problemas para agenciarse con las asignaturas más interesantes.
Me gusta cómo está organizado el calendario en el sentido que los exámenes para el primer semestre son a primeros de diciembre y los del segundo a finales de mayo. Esto te permite gozar de verdaderas vacaciones en Navidad, sin ese pesado sentimiento de culpabilidad: "debería haber empezado a estudiar ya".

EL SISTEMA EDUCATIVO
Como en casi toda Europa, el Bachelor degree en biología se concede con sólo tres años de estudios. Es decir, en tres añitos ya tienes un papel con el que dar vueltas por ahí. Aunque suena bien, la verdad es que no sirve para nada. Aquí en Noruega un Bachelor no es nadie. Alguien con estudios de FP tiene infinitas posibilidades laborales comparado con un licenciado.
Después, generalmente, se elige un master, que son dos años de alguna especialidad. Una vez consigues el título de Master, puedes acceder al doctorado. En realidad, es igual que en España, porque nosotros podemos acceder al Doctorado sin Master. Siguen siendo cinco años.

LAS CLASES
Las horas lectivas son muchísimas menos, donde va a parar. Acostumbrado a ir a clase de lunes a viernes durante 3 o 4 horas al día, el cambio ha sido radical. Creo que he notado la diferencia no tanto en el hecho de empezar las clases en agosto, sino en el tener clase sólo los lunes y los martes. De vez en cuando tengo alguna práctica en Bioinformática Aplicada, pero generalmente son 6 horas a la semana, 4 el lunes y 2 el martes. El lunes entro a las 12:00 y el martes a las 14:00. Otras asignaturas (en mi caso Alpine ecology y Ordination and gradient analysis) son cursos intensivos durante una semana, es decir, unas 6 horas al día de lunes a viernes. Conceden 5 ECTS credits por cada una.
Aunque suena completamente idílico, la cruda realidad es que tengo que estudiar todos los días, una cosa que no había hecho en mi vida. En cualquier tiempo libre, tengo que aprovechar para preparar un coloquio, leer papers, hacer ejercicios... Es un constante no parar. A eso se le junta la dificultad del idioma, que poco a poco creo que voy solventando.

LOS ESTUDIANTES
Una característica de la beca Erasmus en Noruega, es que, por lo menos en Bergen, las clases están formadas por estudiantes Erasmus. De ahí que las clases sean en inglés y no en noruego. En la asignatura Alpine ecology, por ejemplo, éramos 24 estudiantes, de los cuales sólo 5 eran de aquí. Pasa otro tanto de lo mismo con mis otras asignaturas. En Developmental genetics son sólo dos noruegos de 15 personas en total. Y eso es porque los noruegos no van a la Universidad.
En este país hay mucho dinero: en Noruega hay pozos de petróleo que suministran a media Europa. Eso genera una riqueza asombrosa, de manera que aquí sólo estudian los que quieren aprender. Al contrario que en España, donde hoy en día tener una carrera es casi necesario, aquí con una carrera NO LLEGAS TAN LEJOS COMO CON UNA FP. Estuve hablando con un amigo noruego en Finse sobre este tema; los noruegos que están en la Uni son frikis. Pero frikis que te cagas.
Esto beneficia muchísimo a los estudiantes, que tienen hueco en todas las asignaturas en las que quieren matricularse. Eso es una auténtica gozada. Ha sido como volver al colegio.

LOS MEDIOS
El Estado tiene dinero, eso está claro. Y mucho. Por eso la matrícula aquí cuesta 30 euros cada semestre. Con tarifa plana en cuanto al número de asignaturas de las que quieras matricularte. Algunas asignaturas -generalmente aquellas que requieren de una salida de campo de una semana, por ejemplo- cobran algo, pero siempre menos de lo que cuesta. El déficit que genera la Universidad es enorme. Y eso está de puta madre. Los medios son alucinantes. Tengo una compañera de la Autónoma que está aquí conmigo que se ha matriculado en una asignatura en la que usan microscopio electrónico. Tal cual. Yo me había matriculado también en un principio, pero como me sobraban créditos, al final la cancelé. Ay de mí que gran error. En la Autónoma, un microscopio electrónico es algo que no pueden usar ni los postdocs, joder.

Al final no sé si es mejor o peor, porque los contras del sistema de estudio son muy graves: aquí la gente está terriblemente especializada. Los tres años del Bachelor no sirven para nada, el background de los estudiantes es nulo. Los de ecología no saben lo que es el ADN y los de molecular no han oído hablar de dinámica de poblaciones. Y eso está muy mal.
Me tengo que ir, que empieza mi clase de genética.

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Bergen, 01 octubre 2006

Crónica de otra FUNKY-NIGHT

DJ WantedHay muchas cosas que no he hecho todavía en este mundo. Pero desde esta noche, una menos. Me apunté la semana pasada a un concurso de DJ aquí en el club de la residencia. Harto de Shakira y Alejandro Sanz, pensé que sería buena idea poner algo diferente; si se me permite la expresión, algo mejor.
Le dije ayer a una amiga que si conseguía el puesto de trabajo como DJ -además de que me habría entrado la risa- me habría ido un fin de semana a Londres a comprar CD's baratos a Camdem.

Nunca había ejercido de DJ, así que lo primero que hice fue hacer partícipe al encargado de la competición de mis carencias como DJ. Me dijo que no importaba, que era muy sencillo. Otros se habían apuntado sin tener ni idea. Lo primero fue elegir estilo. Podría haberme decantado por pinchar un tema famoso detrás de otro y puerta, pero bueno, puestos a pinchar, vamos a intentar hacerlo bien. Así que FUNKY.

El concurso ha sido en general una gran bazofia. Al final éramos sólo 6 los participantes. Dos de ellos llevaban muchos años pinchando, tenían tablas. Y muchos CD's. Los otros cuatro éramos unos peleles con ganas de poner un poco de nuestra música. En realidad se trataba de eso. Para mí, era una ocasión de colocarme detrás de la mesa y ver qué se siente cuando eres tú el que elige lo que va a sonar en ese garito completamente podrido de música pachanguera de playa. El que normalmente pone la música en el Fantof Club, no sale de los temas del verano y se repite a más no poder. Asqueroso. No he mencionado que el premio para los dos ganadores era trabajar en el Club 3 o 4 veces al mes. Una mierda en realidad, porque el DJ cobra lo mismo que el camarero, 50 coronas la hora (la mitad que un pescadero, no es broma).

Ha empezado la noche un italiano pinchando house durito. Para empezar la noche, a mi parecer, un poco fuerte. Aunque la gente no se ha movido, la verdad es que el chico dominaba. Le ha seguido otro crack, que ha tirado más hacia el trance y tal, pero también un poco fuerte, quizás. La gente se ha levantado con el tercer participante, que ha roto el tecnazo electrónico con Gorillaz. La verdad es que el chaval no tenía ni pajolera idea, pero los temas estaban muy bien elegidos: la gente ha bailado mucho.

La gente bailaba, bailaba, bailabaLuego ha llegado mi turno. Debo reconocer que estaba nervioso, no sé porqué. No sabía con qué tema empezar. Al final, he optado por Get uppa, un tema archiconocido para ver que cara ponía la gente. Bueno, no voy a dar detalles de los temas pero creo que, sinceramente, ha estado muy bien. Hasta con detalles de bajos y volumen en plan DJ profesional. Creo que de los que no teníamos ni idea, he sido el único que he usado el pitch. ¡Que no sepa utilizar unos platos no significa que no sepa como funcionan!
El sonido de la sala es bastante bueno. El sitio, si no fuese por la música, debo reconocer que es grande y está bien arreglado. Pero el concurso... Después de mí, una chica con aspecto de madre se ha puesto en los platos para deleitarnos con... sorpresa. Shakira, Alejandro y compañía. Otra vez. No podía creer que estuviese perpetrando tan terrible delito. Y la gente se ha vuelto loca. Mierda. La pachanga gana.

Lo más divertido ha sido el método utilizado para seleccionar a los ganadores. Se trataba de medir a oído cuánto gritaba la gente por cada candidato. Los dos primeros participantes, DJs DE VERDAD, al no tener muchos conocidos en la sala -no la frecuentan mucho, al igual que yo- no han recibido más que un soso aplauso. Yo he recibido otro aplauso. La chica, que simplemente cambiaba los volúmenes de un plato a otro para cambiar de canción, ha recibido una ovación -con gritos desgañitados y profusos silbidos- digna del propio Andy Smith.
La noche no ha sido tan horrorosa, puesto que también ha conseguido el puesto de trabajo un chico que, aun no siendo un profesional, tenía buen gusto. No pinchar mierdapachanga aquí es un logro. Así que las noches en las que pinche él, procuraré pasarme por el Club a bailar algo diferente. La otra ganadora supone simplemente que cambie la cara del que hay tras la mesa: la música que le gusta a ella coincide exactamente con lo que ya estoy acostumbrado a oír en el Club.

Don't touch me...Como experiencia, una gozada. Cada vez amo más el funky, no lo puedo evitar: anoche con Andy Smith disfruté como un chaval. Y sí, lo reconozco, ME COMPRÉ UNA CERVEZA. Esta noche pinchando me lo he pasado en grande. Cada vez que levantaba la vista de la mesa y veía gente bailando al ritmo de Liquid Soul, Daft Punk o Fatboy Slim, era todo un subidón.

Londres tandrá que esperar.

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